El debut en la temporada fue lapidario: goleada 4-1 ante Unión Santo Domingo, un rival sin historia en el fútbol nacional. Y más allá del resultado, preocupa el fondo: nuevamente hubo problemas con los carnets de cancha, un síntoma que se repite cada año. Para muchos, esto es reflejo de una dirigencia sin planificación, sin rumbo, y que parece estar de espaldas al sentimiento de su hinchada.
El reclamo ya no es aislado. Cada vez más voces piden que el Grupo Oviedo, liderado por Edwin Oviedo y con José Carlos Isla como representante visible, dé un paso al costado y venda el club. La crítica es clara: falta experiencia en la gestión y hay poco compromiso con el futuro deportivo de la institución.
"Con un presupuesto limitado se puede competir", señalan algunos seguidores, quienes además sugieren apostar por gente identificada con el club, como Deyair Reyes, Guillermo Franco Echeandía, Fidel Inolopú o Alfredo Carrillo. La combinación de juventud y experiencia es posible, dicen, si hay voluntad y conocimiento.
Mientras tanto, equipos novatos como Deportivo Lute o Juventus demuestran una preparación más seria que el llamado "más grande del norte del país". Y eso, para los hinchas, es simplemente inaceptable.
El pedido es frontal: “Señores del Grupo Oviedo, abandonen y vendan el equipo. Si alguna vez se les admiró por llevar al Aurich a la élite, hoy ese sentimiento se ha transformado en decepción. Duele ver al equipo así”.
La pelota ya no está en la cancha. Está en las manos de quienes toman decisiones desde la dirigencia.
