El fútbol argentino vivirá este sábado 19 de julio una jornada histórica. Después de más de una década, vuelven las dos hinchadas a un estadio, en el marco de una prueba piloto que se desarrollará en el partido entre Lanús y Rosario Central, equipo que tiene entre sus filas al experimentado Ángel Di María. El encuentro, programado para las 2:30 p.m., será el primer paso en la reinstauración progresiva del público visitante en el país.
🗣️ “Es el comienzo de algo que todos esperábamos”
Claudio ‘Chiqui’ Tapia, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), fue quien encabezó el anuncio. En conferencia de prensa, subrayó que este hecho marca “un antes y un después” en el fútbol nacional. “Es el principio para el regreso de los hinchas visitantes. Empezaremos por Provincia de Buenos Aires, es el comienzo, pero hay mucho trabajo por delante”, puntualizó el directivo.
Tapia también hizo un llamado a la responsabilidad compartida: “Es algo que el hincha del fútbol quiere. Va a llevar mucho compromiso de todos: dirigentes, autoridades y la gente. Queremos que vuelva a ser el fútbol de la familia”.
🔒 Protocolos, condiciones y antecedentes
Por su parte, Javier Alonso, ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, respaldó la iniciativa, pero recordó que el retorno de las dos hinchadas conlleva obligaciones. “Tenemos que terminar con la cultura del aguante. Queremos el folklore, las dos hinchadas, pero tiene que ser el fútbol de la familia”, expresó.
Además, precisó que cada club será responsable de solicitar la presencia de público visitante y, en consecuencia, deberá asumir un compromiso en cuanto al cumplimiento de protocolos y el comportamiento de sus socios en condición de visita.
Este retorno se produce tras doce años de ausencia del público visitante en los estadios. La medida se adoptó tras los hechos ocurridos el 10 de junio de 2013, en el estadio de Lanús, cuando un enfrentamiento entre la hinchada local y la policía dejó como saldo el fallecimiento de Javier Gerez, miembro de la Subcomisión del Hincha granate. Desde entonces, los partidos se jugaron con solo una parcialidad, como medida preventiva.
Este sábado, el fútbol argentino no solo volverá a tener hinchas en ambas tribunas. También pondrá a prueba su capacidad de recuperar el espíritu familiar del deporte más popular del país. El desafío no es menor. El objetivo: que esta prueba sea el punto de partida para una convivencia posible.
